El
tiempo, ese enemigo cruel y asechador de
todos los seres humanos es uno de los más grandes temores de la humanidad, millones
de personas en el mundo viven o han vivido la angustia de cumplir años.
Encuentro
bastante contraproducente el hecho de que esta fecha sea tan esperada por todos
pero al mismo tiempo también sea el
motivo de una catastrófica crisis emocional. Para muchas personas cumplir años
puede significar un proceso de autodestrucción y desvalorización, todo esto
debido a que nuestra sociedad ha respondido durante las últimas décadas a
estándares patriarcales de belleza donde
se ha creado el paradigma de que envejecer es un hecho indigno y lamentable,
pero debo decirles que cumplir años es obligatorio mientras que envejecer es
simplemente optativo.
Hoy
cumplo 27 años de edad, para muchos serán pocos años mientras que para otros
serán muchos. Hoy decidí apartarme de todos esos señalamientos y escogí ser
feliz y libre; Libre, para poder tener criterio de selección y feliz para tener
autonomía. Envejecer ya no es una preocupación, ahora opto por envejecer con
dignidad y para esto asumo con bastante honorabilidad cualquier tipo de cosa
que los años conllevan. Acepto que gradualmente estoy ganando más peso, acepto que cada vez pierdo más pelo, y sé muy bien
que mi cabeza será una bola de billar , acepto que me estoy volviendo sordo gracias los vellos
que nacen en mis oídos, acepto también que me están gustando los boleros y
que de alguna manera extraña estoy amando
también completar crucigramas. Pero lo más importante de todo es que
aprendí a no alimentar más al monstruo
del ego para así poder dejar
sedienta a la descarada vanidad y perpetuar mi libertad. Vivimos en una
sociedad esclava y encadenada a ideas superficiales, haciéndonos presos de
nuestros propios flagelos, coexistimos en aquella sociedad donde es más
importante como nos ven los demás antes de tener una clara visión de lo que
somos nosotros mismos. Considero que deberíamos variar un poco ese
distorsionado concepto que tenemos culturalmente sobre nuestro aniversario y para esto propongo unas
ideas para que esta fecha sea especial y no se convierta en una pesadilla
anual:
1. No viva del pasado
Sin duda alguna uno de los grandes inconvenientes que
tenemos al cumplir años es ese flagelo que se tiene al momento de medirnos con la
vara métrica del pasado. Siempre tenemos esa absurda tendencia de castigarnos
por aquello que hicimos y por aquello que no hicimos en nuestras vidas, y es
que hay que entender que el pasado es una puerta cerrada y que si se abre se
pierde la noción del presente así como también la visión del futuro. No estoy proponiendo que olvidemos el ayer y
que sigamos en nuestro camino sin mirar atrás, sino que al contrario propongo
la idea de que debemos valorar nuestro pasado para así poder tomar lección de
él y continuar con el maravilloso camino
de la vida sin ningún tipo de obstáculo, ya que pensar en los errores cometidos
se vuelve un círculo vicioso sin salida alguna y nos puede llevar a ese letargo
crónico del existencialismo. Vivamos el presente como aquello que nos
corresponde para así poder tomar cosecha en el futuro de aquello sembrado en el
pasado
2.Auto aceptación.
Debo decir que no existe en el mundo elemento más cruel y endemoniado que el espejo.
Este objeto es capaz de atiborrar el ego o simplemente atacar la salud mental
de cualquier ser humano dejando
vulnerable la autoestima. Pero para contrarrestar esto solo existe un antídoto
capaz de desviar estos superficiales ataques y es la auto aceptación. Es natural que el ser humano sufra esa
dicotomía anatómica entre la juventud y la vejez, es evidente como el paso de
los años se marca en nuestra piel, en nuestras facciones y en nuestra manera de
pensar. Pero lo que no es natural es como nos aferramos a esa idea descomunal
de mantener una fisiología joven y esbelta a toda costa cuando la gravedad
siempre será aquella enemiga acérrima de la juventud y por más cirugías o
tratamientos que se inventen siempre cobrará sus cuentas y con mucha
sabiduría y justicia pondrá todo en el
lugar correspondiente. Considero que el paso de los años trae consigo muchas bendiciones en forma de arrugas que siempre serán el hecho
evidenciador o la marca de muchas sonrisas, carcajadas y algunas tristezas, y
es que no hay obra más absurda que llegar a la ancianidad y encontrar en
nuestro reflejo un rostro vacío y terso con carencia de marcas de sonrisas y
carcajadas, yo por mi parte optaré por
llegar a una ancianidad
llena de pliegues de piel que
seguramente me recordaran los momentos
maravillosos en mi juventud y que mi reflejo será simplemente una ventana
conectora entre el pasado y mi presente. La auto aceptación no es solo un
discurso dictado por Walter riso, es una
decisión de ser feliz en la vida, dejemos de alimentar a la caprichosa vanidad,
aceptémonos tal cual somos y seamos felices con las bendiciones que el paso de
los años ha traído para nosotros.
3. Agradezca profundamente
Naturalmente, cuando pensamos en la idea de cumpleaños
estamos evocando mecánicamente en nuestra mente esa imagen característica de
una enorme torta, muchas velas,
familiares y amigos alrededor. Esta imagen trillada es tan solo una
representación de lo que la cruel sociedad ha impuesto para hacernos creer que
somos amados y que ese día podamos permitir que nuestro narcicismo salga a
flote para hacernos creer que ese día en
especial merecemos toda la atención del
mundo. No estoy diciendo que no deba ser así, lo que quiero corregir es que no
solo en esa fecha se debe sentirse especial ya que por el solo hecho de existir
ya somos especiales (eso sin caer en el egocentrismo). Antes de cualquier
celebración con amigos familiares y conocidos, se debe reconocer y agradecer
antes que nada la oportunidad de haber recibido la bendición de continuar una
vez más en el juego de la vida ya que agradecer es un ejercicio vital para
continuar con esa actividad reciproca de la vida que consiste en dar y recibir. Por esta razón considero que
agradecer es un hecho importantísimo y vital antes de cualquier celebración
debido a que de esta forma podremos perpetuar en nuestra mente cada celebración
y como bien lo decía un filósofo chino:
“El agradecimiento es la memoria del corazón”Lao- Tse
Después
de haber expuesto estos tres puntos sugiero a que nos desprendamos
completamente de eso miedos irracionales de cumplir años y envejecer, ya que no
existe peor obstáculo que vivir bajo estos miedos que nos condenan cada vez más
a ser infelices. Hay que aceptar las cosas como vengan, no hay mayor reto que
afrontar las dificultades con altiveza y gallardía; altiveza para afrontar los
años que se vengan con toda la madurez y la inteligencia del caso y gallardía para asimilar cualquier
efecto que los años traen en sí con la mayor dignidad. La tarea realmente aquí
no es cumplir años el propósito que todo mundo debería tener es más bien trazar
objetivos para poder asi cumplir las metas establecidas.